Poca gente lo sabe. Pero lo peor de todo es que muy pocos lo valoran. Por eso, te invitamos a hacer la siguiente reflexión: ¿cómo sería una semana en tu Oficina sin que las impresoras funcionen? Imagina por un momento cómo sería la sucesión de acontecimientos a lo largo de horas y días…
Sí. Lo sabemos. Todo sería un auténtico caos y probablemente se vería afectado hasta el ambiente de trabajo. Por eso, ahora entenderás mejor por qué las impresoras son una de las grandes aliadas de cualquier oficina. Procuran hacer muy bien su trabajo, facilitarnos en la medida de lo posible nuestro día a día y aunque no sean humanas, pues también tienen momentos malos, en los que cometen errores y dejan de funcionar, casi siempre en el instante más inesperado (nunca es buen momento).
Cuando esta situación se produce, en la mayor parte de las ocasiones, los trabajadores de la Oficina, suelen perder los nervios y actuar con comportamientos absolutamente fuera de su control. Por eso, para que no vuelva cundir el pánico, en este POST de OfficeXpress queremos ofrecerte una pequeña guía de errores más habituales, que incluye además una serie de consejos para solucionarlos. Son los siguientes:
• El papel se queda atascado:
Cuando esto ocurre, el primer instinto que tenemos es tirar del papel para intentar desatascarla, pero esto es uno de los errores más comunes. ERROR… Lo ideal sería retirar el atasco abriendo la escotilla superior de la impresora, con el fin de eliminar todos los restos de papel correctamente. Así no dañaremos los componentes internos de la máquina.
• Desalineación de líneas y colores:
Suele ser bastante común. Para solucionarlo hay que ir al panel de control de nuestro ordenador, seleccionar ‘’preferencias/propiedades de impresión’’ y realizar una alineación o limpieza de cabezales. De esta forma, todo se verá de “otro color”.
• El ordenador no reconoce la impresora:
Si nuestro dispositivo no reconoce la impresora, lo primero que deberíamos comprobar es el cable USB por si estuviera dañado. De ser así, lo correcto sería reemplazarlo.
Si la impresora es inalámbrica, lo más recomendable sería comprobar que la red no tiene ningún problema técnico y funciona correctamente. Otra opción sería actualizar el controlador de la impresora, ya que se podría haber quedado anticuado.
• El color de la impresión es pobre:
Es muy probable que los consumibles estén agotándose o no se haya utilizado un consumible adecuado. En ese caso, el procedimiento habitual es comprobar en qué estado se encuentra la tinta, ya que las opciones son múltiples. Puede estar seca o incluso, el cartucho puede haberse obstruido